
Una de mis aficiones es la escritura. Empecé hace unos años escribiendo un libro autobiográfico, más tarde escribí otros dos. Los artículos siguientes tienen por centro al hombre más importante de la historia de la humanidad, Jesús, el Mesías, el Hijo de Dios. Él nos hizo el regalo más grande de todos los tiempos. Jesús nos dio el perdón de los pecados y la Vida Eterna a aquellos que creen en Él y le siguen.
juan miguel martin
- 1 LA FAMILIA DE DIOS Y NUESTRA FAMILIA
- 2 EL SECRETO DEL ÉXITO
- 3 EL PODER DE LA MENTE Y EL JUICIO DE DIOS
- 4 COMO GANAR A LA LOTERIA
- 5 EL TITANIC SE HUNDE Y TODOS ESTAMOS DENTRO
- 6 LA PANDEMIA DE LA INTELIGENCIA HUMANA
- 7 LA LOCURA DEL SER HUMANO
- 8 LA ESCLAVA DE DIOS
- 9 LA TELEFONÍA DE DIOS Y LA DEL DIABLO
- 10 LA IGLESIA CATÓLICA SE HUNDE
- 11 AL SERVICIO DE SU MAJESTAD DIOS DE ISRAEL
1
La Familia de Dios y nuestra familia
La familia, desde el Genesis hasta el nacimiento de Jesús, es el eje de relación entre Dios y los hombres. Empieza con Adan y Eva y continua desarrollandose a través de la familia de Noé, Abraham, Jacob, David…, hasta llegar a José y María, padres de nuestro Señor Jesucristo. De hecho el pueblo de Israel es en realidad una familia. Todos ellos son descendientes de la familia de Jacob.
No es casual. La familia nos marca el destino desde el comienzo de los tiempos.
Buscamos a Dios pero El no se oculta. Dios ha puesto todo delante de nuestros ojos. Cuándo le pidieron los apóstoles a Jesús como orar les dijo así: “Padre nuestro que estás en los Cielos…” Jesús de esta forma nos revela que Dios es Padre. Él nos dice que conoce al Padre, pues viene de Él (Juan 14:8-10). Dios Padre dice de Jesús que es su Hijo (Mateo 3:16-17). Estamos ante una Familia.
Esto es importante. Todos los seres humanos somos hijos y la mayoría también padres. ¿Y si, en realidad, la familia es, a la pequeña escala humana, la forma de conocer a Dios Padre, Hijo y el Plan de la Creación? Jesús nos habló de Dios como Padre y de él como Hijo y nosotros pensamos en el concepto que tenemos de lo que es un padre y un hijo.
Pero… ¿Y si, en realidad, la familia fue desde el principio, un pálido reflejo de la Familia que ya existía en Dios?
Todo parece indicar lo siguiente. Las familias de las que formamos parte como padres, hijos…, son una mota de polvo en la Creación. Sin embargo son un reflejo de aquello a lo que estamos llamados después de la resurrección. Es la forma de conocer, a pequeña escala, la escala familiar, el grandioso plan de Dios para aquellos que se salven. De esta manera Dios nos hace participes de su plan a nuestra pequeña escala. Vivimos inconscientemente como padres e hijos sin ver la relación y aprendizaje que Dios nos muestra. Dios Padre a un padre de familia. Jesús, Hijo de Dios, a cada hijo de la raza humana.
Podríamos ir aún más lejos. Desde el comienzo de los tiempos el diablo persiguió la destrucción del plan de Dios. Por este motivo tentó a Adán y Eva. Pensó que si caían Adan y Eva se irían al infierno todos sus hijos, osea, toda la humanidad. En los planes de los ángeles caídos se hallaba el deseo de destruir el plan de Dios arrastrando a la humanidad al infierno. Observar. Podría ser coincidencia pero yo no lo creo. A escala humana, la escala familiar, como padres, podemos vivir la experiencia del plan de Dios. Veremos si nuestra familia sobrevive las tentaciones de los demonios y del mundo. El resultado será que o se mantiene unida de por vida o es destruida. La destrucción de la familia, con la separación, del padre, la madre y los hijos, es como el fracaso del plan de Dios a nuestra insignicante escala.
Dios nos está hablando de su Familia, aún sin palabras, a través de las nuestras. Padre (Dios) a padre (humano) nos hace participes, a pequeña escala, de su trabajo. Todo lo que observo leyendo la Biblia es una sola Familia después del juicio final y vamos a pasar a los detalles.
-Tenemos un Dios que es Padre (Lucas 11:2).
-Tenemos a Jesús, Hijo de Dios, por quien somos hechos hijos de Dios (Juan 1:12, Romanos 8:14).
-Después de la resurrección las personas no se casarán (Mateo 22:30).
-Después de la resurrección no tendremos el ADN humano que conocemos. Serán cuerpos diferentes, de otra naturaleza. Jesús fue el primero (1 Corintios 15:35-52).
-La mejor forma de imaginar el concepto de una familia humana es pensar en un padre, una madre y unos hijos, en el hogar familiar, en torno a una mesa. Esa es la imagen que Jesús nos da de lo que pasa después de la resurrección, una familia en torno a una mesa (Lucas 14:15-25, Mateo 22:1-14).
Resumiendo. Tenemos un Padre, el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo. Somos hijos adoptivos de Dios con un hermano, nuestro Señor Jesúscristo, nuestro salvador y primogénito. Nuestros cuerpos son celestiales, nada que ver con el ADN humano que tenemos en la Tierra. El primero de todos fue Jesucristo tras su resurrección y, conforme a estos cuerpos, todos somos también familia. Somos también una sola familia ya que las personas no se casarán. Nos sentamos a la mesa en los Cielos como todas las familias lo hacen en sus hogares. Como podéis ver, después de la resurrección, lo que se puede ver es UNA SOLA FAMILIA, LA FAMILIA DE DIOS.
Sin embargo he dejado algo para el final. Es un as guardado en la manga que voy a proceder a revelar. Alguien que sea observador habrá pensado que en todas las familias humanas hay una madre. Es verdad. Aquí, nuestros hermanos evangélicos, si alguno se ha aventurado a llegar hasta aquí en la lectura, tenga paciencia para llegar hasta el final aunque no lo comparta.
Jesús se hizo semejante en todo a nosotros excepto en el pecado (Hebreos 2:17). Nació de la Virgen María (Mateo 1:18-25). Jesús, siendo Dios, estuvo unos 9 meses en el vientre de la Virgen María, como todos los seres humanos. Desde que nació hasta su muerte en la cruz, a aquella mujer, María, la llamó “mama”.
¿Alguien piensa que porque haya resucitado ya no llame Jesús a la Virgen María “mama”? Sabemos que cuando Jesús se encarnó se hizo semejante a nosotros en todo. Sabemos que Dios es el primero en todo. Los mandamientos vienen de Dios y El es Santo e irreprensible en su cumplimiento. Uno de los mandamientos de Dios que es para nosotros, humanos, pero también para Jesús es muy revelador. “Honra a tu padre y tu madre” (Deuteronomio 5:16, Marcos 7:10). Jesús honra a su madre, la Virgen María.
¿COMO DEBERÍA HONRAR JESÚS, HIJO DE DIOS, A SU MADRE? Pensar que Jesús es Dios y la Virgen María es la mujer que le tuvo en su vientre, la que cuidó de él y fue su madre igual que el resto de las madres. Jesús honra a María como sólo Dios puede hacerlo, la hizo madre de todos los hijos de Dios ( Juan 19:26-27).
Aquí queda desvelada la última pieza. En la resurrección hay un Padre, Dios Padre. Hay una madre, la Virgen María. Hay también un Hijo, Señor y primogénito, Jesús. Finalmente están todos los hijos que son hermanos de Jesús, hijos adoptivos de Dios y tienen a María por madre. NO HAY MAYOR HONRA DE JESÚS A SU MADRE, LA VIRGEN MARÍA, QUE HACERLA MADRE DE TODOS SUS HERMANOS.
HE AQUÍ LA FAMILIA DE DIOS.
Juan Miguel Martin (Escrito el 02-03-2021)
2
EL SECRETO DEL ÉXITO
Seguro que el título no es nuevo pero si lo será el enfoque. Hay un factor determinante en el secreto del éxito, este factor lo es todo y, sin él, ese éxito, puede convertirse en una victoria pírrica. Dejarme que empiece por una pequeña historia. Esta historia tiene por protagonista al rey Pirro de Grecia.
“Pirro, rey de Epiro, logró una victoria sobre los romanos con el costo de miles de sus hombres muertos en el campo de batalla. Se dice que Pirro, al contemplar el resultado de la batalla, dijo: «Otra victoria como esta y volveré solo a casa» (en griego: Ἂν ἔτι μίαν μάχην νικήσωμεν, ἀπολώλαμεν).”
Fin de la historia. Dos victorias como aquellas y al rey Pirro no le habría quedado un solo soldado. De la misma manera, cuando se descuida el factor TIEMPO, el éxito puede convertirse en fracaso.
Ahora vamos a ver con tres ejemplos como el factor tiempo desvanece lo que era un éxito.
El primer ejemplo lo tomaré de la vida civil. Hay un momento en la vida de los jóvenes en los que algunos dejan los estudios para ponerse a trabajar. Entonces pasa lo siguiente. Aquellos que se ponen a trabajar ganan dinero y con ello adquieren un vehículo y tienen dinero para adquirir otras muchas cosas. Mientras tanto los que siguen estudiando deben centrarse en sus estudios. Aparentemente los que han dejado los estudios han triunfado, han alcanzado el éxito y tienen lo que quieren. Pasado el tiempo los que siguen estudiando terminan sus carreras, adquieren puestos de trabajo mejor pagados y alcanzan un nivel de vida superior a los primeros. Entonces descubrimos que el éxito sirvió los intereses de los primeros en el corto plazo y en el largo plazo el éxito alcanzó a los segundos.
El segundo ejemplo lo tomaremos del ámbito militar. Alemania y Japón comenzaron la segunda guerra mundial ganando en todas las batallas. En los primeros años de la segunda guerra mundial eran imparables, parecían invencibles, el éxito les sonreía allá dónde condujeran sus ejércitos. Pasado el tiempo comenzaron a ser derrotados, entonces, británicos, rusos y norteamericanos ganaban en todos los frentes y se hicieron finalmente con la victoria en la guerra. En realidad Alemania y Japón, a pesar de sus victorias iniciales, no tenían los recursos necesarios, ni los soldados suficientes para vencer en aquella guerra, en cuanto se vieron sobrepasados por la falta de recursos y de hombres perdieron.
El tercer y último ejemplo lo tomaremos del ámbito político. Se pueden tomar ejemplos de todos los campos que podáis imaginar pero lo único que pretendo es resaltar el tiempo en cuanto a factor determinante cuando se planifica el éxito. En el ámbito político hay partidos nuevos que nacen con promesas y reivindicaciones que parecen que van a cambiar la historia. La gente se llena de ilusión y les vota. Esos partidos alcanzan el éxito. Sin embargo el tiempo demuestra que sus promesas son pompas de jabón, se pinchan y no queda nada. Son partidos que en poco tiempo desaparecen con la misma rapidez que aparecieron.
Fin de los ejemplos. Llegados a este punto os preguntareis si hay un secreto del éxito. SI, LO HAY. El tiempo se relaciona con la vida. Entender esto, planificamos nuestras expectativas, nuestros proyectos…, en relación a nuestra vida. Por tanto la primera clave del éxito es la vida. Entender bien esto. No es lo mismo que vayáis a vivir 10 o 100 años. El éxito se relaciona con la vida y, conforme a esta, se planifican las prioridades, expectativas, ilusiones, deseos…
Jesús de Nazaret dijo (Mateo 16:26-27): “¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero, si pierde la vida? ¿O cuánto podrá pagar el hombre por su vida?.«Porque el Hijo del hombre ha de venir en la gloria de su Padre, con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno según su conducta.”
¡¡¡EL SECRETO DEL ÉXITO CONSISTE EN SEGUIR VIVIENDO, NO SOLO 10 O 100 AÑOS SINO OTRO MILLÓN DE AÑOS, 1000 MILLONES DE AÑOS, LA VIDA ETERNA!!!
Aquí es dónde comienza mi incomprensión a una gran parte de la raza humana. Veo a los poderosos, a los inmensamente ricos, que acumulan más y más riqueza. Nunca tienen suficiente y, sin embargo, son viejos, no van a vivir muchos años y no se van a llevar una sola moneda de esa fortuna. Veo a gente normal haciendo sus vidas como si fueran a vivir eternamente. Lo cierto es que, incluso 80 años, pasan rápido, jóvenes, adultos, ancianos… A algunos no les importa si hay vida más allá de la muerte otros responden con un “algo habrá”. Se diría que unos se concentran en un éxito temporal y otros confían ciegamente que si hay algo será bueno para ellos. Es una forma ciega de enfrentar el presente y el futuro. ¿Os acordáis de los ejemplos de éxitos que luego se van? De eso os estoy hablando. Ser uno de los hombres más ricos de la Tierra y morir luego sin saber que va a ser de ti, vivir como si esta vida fuera todo y pensar que si hay algo tiene que ser bueno para ti… Esta clase de pensamientos es el resultado de buscar un éxito temprano y descuidar el futuro. Aquí es dónde debéis hacer un esfuerzo en pensar cual va a ser el alcance de vuestras vidas. La clave del éxito debe buscarse a largo plazo, de nada sirve un éxito que va durar 10 o 50 años si vas a vivir un millón y, ganando 50 años de éxito vas a perder 1 millón de años en la miseria.
Hace casi 2000 años ocurrió el acontecimiento más grande de la historia de la humanidad. No había televisiones, ni periódicos, ni internet… Sin embargo la gente de aquella época no eran tontos como tampoco lo eran nuestros abuelos que tampoco conocieron internet. Digo esto porque nuestro nivel tecnológico nos hace pensar que somos más inteligentes o que sabemos más que generaciones pasadas. Si nuestro avión o barco sufriese un accidente y quedásemos abandonados en una isla desierta nos veríamos en la edad de piedra. Aclarado este punto os diré que hace casi 2000 años un hombre murió en una cruz. Así era como los romanos ejecutaban a algunas personas. Lo realmente importante fue que después de enterrado en la tumba volvió a la vida. Eso no había sucedido hasta entonces ni ha sucedido después. Aquel hombre tenía la llave para vivir más allá de la muerte, para morir y para resucitar. Ese hombre es Jesús de Nazaret. No es un hombre como otro que haya existido y, aunque no existiera internet, había testigos, sabían de cierto que aquel hombre había muerto y sabían también que aquel hombre salió de la tumba vivo de nuevo. Algún tiempo después aquellos testigos se lanzaron a las calles a anunciar a Jesús de Nazaret, el Mesías, el Salvador, que había resucitado de los muertos. Ese hombre tenía las claves para poder vivir eternamente.
EL SECRETO DEL ÉXITO ES BUSCAR A DIOS, JESÚS DE NAZARET, LA SEGUNDA PERSONA DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD, EL MESÍAS, EL SALVADOR, EL HIJO DE DIOS Y UNA VEZ LO ENCONTRÉIS, SEGUIRLO. ÉL OS DARÁ LA VIDA ETERNA.
Juan Miguel Martín (Escrito el 10-04-2021)
3
EL PODER DE LA MENTE Y EL JUICIO DE DIOS
Todas las cosas que hacemos los seres humanos nacieron de la mente. Un edificio nació en la mente de un arquitecto, la visita a un amigo tal vez fue decidida el día anterior, una buena o mala palabra a otra persona surgió en el torvellino de una conversación…
Todas las cosas preceden siempre en la mente. Lo importante es que conviene no identificarse con la mente sinó con el „observador“ que vigila cuanto llega a la mente. Es más fácil si comparamos la mente con un puesto fronterizo y al „observador“ con un policía que controla la entrada de personas y mercancias. Esas „personas y mercancias“ que llegan al puesto fronterizo son todo lo que llega a la mente, lo que vemos con los ojos, lo que oímos, incluso lo que pensamos en base a nuestros conocimientos… El „policía“ es nuestro verdadero ser, está por encima de la mente y, si prestais atención, podreis „observar“ lo que pasa por vuestra mente sin identificaros con todo ello, sinó, juzgando aquello que aceptais y aquello que vais a rechazar. Así os vereis como ese polícia de frontera que controla la entrada y salida de personas y mercancias.
¿Cuál es la importancia de todo esto?
Voy a poner dos casos. El primero es acerca del rey David. Que sirva de ejemplo ilustrativo. Basicamente el rey David, dice la Biblia, que deseaba a la mujer de uno de sus generales, entonces envió a ese general a una batalla, en primera linea, para que lo matara el enemigo y así casarse con la viuda. No voy a ceñirme al texto biblico sinó a los hechos así que podríamos decir lo siguiente. El rey David debió ver a la mujer de su general durante algún tiempo, al principio tal vez se limito a alabar la belleza de aquella mujer, más tarde bien pudo ocurrir que buscara las ocasiones para poder verla, más adelante debió empezar a envidiar la fortuna de su general por tan bella mujer. Pudo ocurrir también (no es biblico) que algún consejero del rey David le dijese algo como: „la vida del soldado es incierta, si hay paz llegará a viejo y si hay guerra morirá dejando una viuda desconsolada“. De ahí a decidir llevar a su general a la muerte colocandolo en el lugar adecuado fue ya tan sólo un paso. Todo este proceso tuvo lugar en la mente del rey David durante algún tiempo. Fijaros bien, antes de que enviara al general a esa batalla para que muriera, el rey David, había deseado ya la muerte de su general para poseer a la viuda a la que codiciaba. Podeis entonces ver que el rey ya era culpable aún antes de la muerte de su general pues ya había concebido el plan en su mente y lo había deseado como medio para poseer la mujer que no le era licita.
Jesús dijo: “Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.” – Mateo 5: 27-28
Ver pues que es preciso „vigilar“ los pensamientos y rechazar todos los que no sean justos. Habeis oido aquello de que somos lo que comemos pues pienso que también podemos decir que somos lo que aceptamos en nuestra mente. No podemos impedir que surjan pensamientos que la mente procesa en base a lo que vemos, oímos, en base a recuerdos, experiencias, cultura, educación…, pero podemos como un policía rechazar aquellos pensamientos que no queremos en nuestra mente. Es importante hacer notar que esto no trata sólo del adulterio sinó de todo cuanto entra en nuestra mente.
El segundo caso es para que penseis en el poder de la mente. Hitler fue responsable del genocidio de millones de judios y otras minorías etnicas además de la muerte en la guerra de millones de personas. A Hitler le llevo años llegar al poder en Alemania y la guerra abarcó 7 años (desde el 1939 hasta el 1945). A lo largo de todos esos años se convirtió en el monstruo que hoy conocemos. Sin embargo la mente es tan poderosa que puede lograr esa monstruosidad en muy poco tiempo. La mente puede traspasar las fronteras, el tiempo y el espacio…, con la mente puedes ser quien quieras y hacer cuanto quieras. Si una persona deseara en su mente ser como Hitler y hacer otro tanto creo que bien podríamos decir que ya lo hizo en su corazón. Entonces podríamos pensar que esa persona es un monstruo aún sin haber llegado a hacer nada, tan sólo por cuanto hay en su mente. No sólo eso sino que ante Dios ya sería culpable de cuánto ha aceptado en su corazón. Oigamos otra vez a nuestro Señor Jesucrito:
Jesús dijo: “Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.” – Mateo 5: 27-28
De estas palabras debemos tomar una lección más importante. SER JUSTOS ANTE DIOS COMIENZA EN LO QUE ACEPTAMOS EN NUESTRA MENTE. AHÍ ESTÁ EL CAMPO DE BATALLA DIARIO.
LA MORALEJA DE TODO ESTO ES QUE DEBEIS „OBSERVAR“ VUESTRA MENTE Y RECHAZAR TODO LO MALO Y ESCOGER LO BUENO. PENSAR QUE DIOS CONOCE VUESTROS PENSAMIENTOS MÁS INTIMOS ASÍ QUE SI VOSOTROS MISMOS JUZGAIS VUESTRA MENTE, ESCOGEIS LO BUENO Y RECHAZAIS LO MALO, CUANDO DIOS OS JUZGUE OS HALLARÁ JUSTOS.
Juan Miguel Martin (Escrito el 24-02-2021)
4
COMO GANAR A LA LOTERIA
Lo primero, antes de valorar si merece el esfuerzo, es calcular el valor del premio. Así que vamos a comenzar con una historia.
Las piedras rai son discos circulares de piedra caliza que eran usadas como moneda en la isla de Yap, en la Micronesia. Los habitantes de Yap extraían las rocas de caliza de las islas Palaos llevándoselas con ellos a Yap en canoas y balsas. La caliza no existía en Yap, por lo que resultaba muy preciada por sus habitantes. Cuando los europeos descubrieron aquellas islas se aprovecharon entregándoles herramientas de hierro para hacer piedras más rápido y les ayudaban con sus barcos a transportarlas. A cambio, esos europeos se llevaban copra, trepang… Las piedras, para un europeo, no valían nada, la copra y el trepang sí. Hoy en día, tal vez, le habrían dicho al nativo de aquellas islas acerca de las piedras: “¡Ahora vas y compras con eso un Iphone chato!”. Fin de esta historia.
Como podéis ver esas piedras eran, para los nativos de Yap, moneda, lo mismo que para nosotros el papel. Ese papel que llamamos billetes o el oro para la gente de siglos atrás. Por cierto, si a aquellos que vivieron en Europa unos siglos atrás les diéramos estos billetes no los aceptarían, serían para ellos tan solo papel pintado. No les culpo, eso es lo que son realmente. Nuestros antepasados confiaban en el oro no en papel coloreado.
Si habéis llegado hasta aquí habréis concluido que el oro sería un premio aceptable ganado a la lotería pero esto también es un error.
Para hallar aquello que nos gustaría ganar a la lotería debemos encontrar lo más valioso en la vida de un ser humano.
¿Sabéis que? Yo y, seguramente, la mayoría de vosotros no tenemos la suerte de tener una fortuna. Sin embargo, muchos de estos hombres y mujeres que han amasado grandes fortunas, son capaces de rehacerlas si el infortunio se ceba con ellos. Son capaces de volver a hacer fortuna si la pierden. Tienen los conocimientos y los contactos. Para esta gente el oro no es lo más valioso en la vida de una persona. No os sorprendáis, en siglos pasados fue así también.
¿Queréis ahora saber cual es el tesoro más grande que hasta un rico hombre desearía ganar a la lotería?
LA VIDA, EL SECRETO DE LA JUVENTUD ETERNA.
Así es y seguro que habéis visto películas que relatan a aventureros de la antigüedad que perdieron sus vidas en busca del Santo Grial o de la fuente de la eterna juventud. En nuestros días algunos congelan sus cuerpos esperando que en el futuro se les pueda revivir. Hay también quienes piensan en lograr clones biológicos y traspasar la mente… La riqueza va y viene, eso lo saben los más ricos de este planeta Tierra, pero la vida se va. El tiempo corre inexorable sobre ricos y pobres, lenguas, razas, naciones, reyes o esclavos…, del tiempo nadie escapa. Al final de la línea del tiempo se halla la muerte y el fin de las cosas para todas las personas en la Tierra.
YA TENEMOS EL PREMIO MÁS VALIOSO QUE GANAR A LA LOTERÍA, LA VIDA.
Lo que más me sorprende es como el hombre la ha buscado en los lugares más lejanos. En realidad el secreto está cerca de nosotros. Si en vuestra vida deseáis tener algo (casa, ropa, coche, teléfono…) seguro que preguntareis quien lo tiene para comprarlo.
¿QUIEN TIENE LA VIDA? ¿QUIEN PUEDE VENDERLA? ¿CUANTO VALE SER ETERNAMENTE JOVEN?
El secreto es que todo esto está al alcance de todas las personas y que es gratis.
El secreto para ganar a la lotería tiene el nombre de un hombre. JESÚS DE NAZARET. El mesías, el Hijo de Dios, la Segunda Persona de la Santísima Trinidad. Jesús murió en una cruz hace unos 2000 años y, a diferencia de todos los seres humanos de todos los tiempos, Jesús volvió a la vida. Resucitó. Este fue el mensaje de los que fueron sus testigos y la transcendencia de aquel acontecimiento pues ni el más grande de los reyes de la Tierra jamás logró algo semejante. Aquel carpintero judío hizo lo que ni aún en nuestros días ningún hombre jamás logrará por si mismo, VOLVER A LA VIDA. Así pues tenemos que Jesús resucitó y que hay vida para aquel que le busca y le sigue. Ese es el secreto para ganar a la lotería, el premio más valioso y más grande que una persona pueda buscar y encontrar.
Juan 14:6 „Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.“
No dejéis que nadie os engañe, muchos dirán que vienen de parte de Jesús pero… ¿Sabéis? No hubo ningún evangélico ni protestante hasta pasado el año 1500 y, el primero de todos ellos, fue un monje agustino católico Martín Lutero, luego vinieron otros. Tampoco olvidéis esto, la Biblia es un libro pero no fue entregado en mano por Jesús de Nazaret, el Mesías. Lo que llamamos Nuevo Testamento, la segunda parte de la Biblia son libros que fueron escogidos por el Papa y los obispos de la Iglesia Católica Apostólica y Romana. Fue la Iglesia Católica que, con la asistencia del Espíritu Santo, decidió que libros venían de Dios y cuales no. Buscar pues la fuente, la Iglesia Católica, quien, desde el apóstol Pedro, guarda el testimonio de las cosas que ocurrieron desde que nació nuestro Señor Jesucristo, hace 2000 años, hasta nuestros días. No olvidéis tampoco esto, SOLO DIOS ES BUENO, en la Tierra, incluso en la Iglesia, siempre habrá hombres de todo tipo, como en todas partes, hombres santos unos, buenos otros, malos otros tantos. Nadie escapa de las tentaciones del mundo y cualquiera puede caer en el mal desde el Papa o un presidente de gobierno hasta el más humilde y pobre de los habitantes de la Tierra.
En medio de todas las cosas que suceden a lo largo de los años y los siglos, la Iglesia fundada por Jesús, seguirá siendo el faro y la luz que alumbra a Jesús y la Vida Eterna.
Juan Miguel Martín (Escrito el 17-04-2021)
5
EL TITANIC SE HUNDE Y TODOS ESTAMOS DENTRO.
Todas estos artículos comienzan con una historia. Como todos sabéis el Titanic era un transatlántico de lujo, en su primer viaje el buque mas grande y más lujoso, de todos los tiempos, que navegaba los océanos.
Cuando el Titanic chocó contra el iceberg no se notó de manera apreciable. Los pasajeros continuaron con sus actividades como si no hubiera pasado nada. Mientras tanto, el capitán y la tripulación evaluaban los daños, trataban de reparar la brecha abierta en el casco del barco y evacuar el agua. Paso algún tiempo hasta que el capitán recibió la mala noticia, el barco estaba sentenciado, se hundía. Entonces comunico a los pasajeros que el Titanic se hundía y que debían conducirse a los botes salvavidas. Es sabido que no había suficientes botes salvavidas pero también que los primeros botes iban medio vacíos.
¿Sabéis porque?
El Titanic era inmenso y nada parecía indicar peligro a pesar de las palabras del capitán Edward John Smith. Los pasajeros, sobre todo de primera clase tenían lujosos camarotes, restaurante, bares, piscina climatizada, gimnasio, piscina cubierta… Ahora el capitán les estaba pidiendo que se subieran a un bote, apretujados con mucha más gente, pasando frío y abandonados en medio del helado océano Atlántico norte. Seguro que en los primeros momentos debió de parecer una broma de mal gusto. Sin embargo, a medida que pasaba el tiempo, se fue haciendo evidente que el Titanic se hundía y no vería salir el sol.
El planeta Tierra en el que habitamos los seres humanos también se asemeja al Titanic. Este planeta, La Tierra, no puede sostener la vida, se hunde, cada generación de seres humanos se va a la tumba en la cual fueron precedidos por sus padres. Así, una generación tras otra van hundiéndose en el océano del tiempo.
¿Recordáis el RMS Titanic? En este transatlántico de la White Star Line había pasajeros de primera clase, de segunda y de tercera. También en La Tierra hay pasajeros de primera, segunda y tercera conforme a la fortuna de las personas.
¿Sabéis que? La noche del 15 de abril de 1912, a las 2:20 horas de la madrugada desaparecía bajo las aguas un orgulloso transatlántico de lujo, el RMS Titanic. En su hundimiento se llevó consigo las vidas de ricos y pobres, tanto de primera clase, como de segunda o tercera.
¿Entendéis esto? No importa cuan ricos o pobres pudieran ser aquellos infelices, el Titanic se llevó a las profundidades del Atlántico norte las vidas de aquellas personas y se hundieron tan solo con la ropa que llevaban puesta.
El planeta Tierra se lleva a la tumba del océano del tiempo, generación tras generación, con tan solo la ropa puesta.
Los faraones egipcios se hicieron tumbas llenas de oro y riquezas pero todas ellas se quedaron aquí, en La Tierra. Esos faraones murieron y desaparecieron en las profundidades del océano del tiempo. Sus riquezas se quedaron en este barco, nuestro planeta, La Tierra.
Os voy a contar algo. Tiempo atrás hubo imperios poderosos, Egipto, Babilonia, Asiria, Roma… En la época del Imperio Romano a Roma se la conoció como la ciudad eterna. Creerme si os digo que los romanos de aquella época jamás imaginaron que tan solo se les había dado un corto periodo de tiempo. Nunca podrían creer que el océano del tiempo los hundiera en las profundidades y tan solo dejara el recuerdo. Eso es lo que también nos queda del RMS Titanic, el recuerdo.
Las generaciones de seres humanos que vivimos ahora en el planeta conocido como La Tierra, también nos hundiremos en ese océano. Solo quedará de nosotros el recuerdo y sin embargo, se diría que la gente vive ciega y ajena a este hundimiento. Veo ricos y pobres, poderosos y pueblo llano, acumular riqueza y disfrutar de los placeres de la vida ajenos al desastre que tienen delante. Es entonces cuando recuerdo aquellos pasajeros del Titanic que se resistían a subir a los botes pues solo les esperaba el frío y el abandono en medio de la nada, apretados y sin espacio para moverse. Ellos preferían las comodidades del RMS Titanic ajenos a las palabras del capitán Edward John Smith que les había asegurado el hundimiento.
Hay una esperanza para todas las generaciones que habitamos el planeta Tierra, ese es nuestro bote salvavidas. Hace 2000 años en las tierras de Israel resucitó un hombre, no un hombre cualquiera sino Jesús, el Mesías, el Hijo de Dios. Eso no había sucedido nunca y nunca más ha vuelto a ocurrir. Jesús, la Segunda Persona de la Santísima Trinidad, nos traía la salvación, la Vida Eterna y nos abría las puertas del Cielo. Lo cierto es que hubo testigos de que aquel hombre, Jesús de Nazaret murió en una cruz y volvió a la vida, subió a los Cielos y dijo de si mismo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida, nadie va al Padre si no es por mí”. Jesús nos trajo ese bote salvavidas, pues si tenemos fe en Él y le seguimos tenemos Vida Eterna. Seguir a Jesús supone renunciar al mundo pues gran parte de lo que sucede en el planeta Tierra es contrario a la voluntad de Dios. Seguir a Jesús es como embarcarse en esos pequeños botes y abandonar la comodidad del RMS Titanic en medio del frio del Atlántico Norte.
¿Sabéis que? Los botes salvavidas fueron rescatados por otro transatlántico, el RMS Carpathia. Si nosotros tenemos fe en Jesús y le seguimos seremos rescatados por Él, seremos hallados justos y tendremos Vida Eterna. Buscar a Jesús mientras podéis hallarle pues de cierto nadie se quedará en La Tierra y el único bote salvavidas es Jesús de Nazaret, Él es el Hijo de Dios, resucitó de los muertos, nadie lo hizo antes ni lo hizo después, solo en El está la vida. Abandonar el RMS Titanic mientras estáis a tiempo, el barco se hunde.
Juan Miguel Martín (Escrito el 29-04-2021)
6
La pandemia de la inteligencia humana.
Desde que apareció el virus a finales de 2019 el mundo ha cambiado. De pronto el miedo se apoderó de la humanidad. Nunca el planeta Tierra había estado tan de acuerdo como cuando empezaron las medidas para detener la pandemia. Todas las personas en todas la naciones del mundo, sin distinción de razas, religiones, ideas políticas…, estaban unidos por una cosa, el miedo a la muerte. Como si fuera una película de Hollywood el tiempo de libertad había terminado. En un abrir y cerrar de ojos todas las personas llevaban bozal. Luego llegaron los confinamientos y los toques de queda.
Recuerdo un día que estaba en un supermercado, había una señora delante de mí. La cajera le pasó una bolsa con unos panecillos por la caja pero uno de ellos se deslizó fuera de la bolsa y tocó la chapa de la caja. Aquella mujer rechazó aquellos panecillos por el miedo a que el virus pudiera estar en la chapa y hubiera contaminado aquel pan. No recuerdo las palabras exactas pero sé que lo hizo por miedo al virus.
He visto hombres y mujeres, conduciendo y siendo las únicas personas dentro sus vehículos. Llevaban puesto el bozal. Esas personas iban solas en sus vehículos, con las ventanillas cerradas y el bozal puesto. El miedo a la muerte domina el mundo.
El viernes fui a una de esas tiendas, una gran superficie, que vende herramientas y todo cuanto necesitas para una vivienda. Teníamos que hacer cola para entrar ya que el aforo está limitado. Delante de mí había una mujer, cogió un trozo de papel para pulsar con el la jabonera que le suministraba el gel desinfectante de manos. Es absurdo. ¿No os parece? De hecho si hubiera un virus sobre la superficie del pulsador que administra el gel moriría al frotarse las manos con el desinfectante. Es una muestra más del miedo al virus, que en realidad es el miedo a la muerte.
Estas son solo unas pequeñas historias que se repiten a diario de múltiples formas. Desde el 2019 el virus ha sembrado el pánico y el miedo en todo el planeta.
Hay algo que no entiendo de esta humanidad, el miedo a la muerte de una manera tan sectaria. A causa del virus y el miedo a la muerte este planeta está dispuesto a los mayores sacrificios. Sin embargo la muerte no es algo nuevo. De hecho está presente de múltiples formas, en la vejez de las personas, en la enfermedad, en los accidentes, en las guerras… Hace 2000 años un hombre venció a la muerte, Jesús, el Hijo de Dios, la segunda persona de la Santísima Trinidad. Hubo testigos de que fue colgado en la cruz, que murió un viernes y el domingo volvió a la vida. Jesús había resucitado. Fueron muchos testigos y, aunque no tuvieran un iphone, no eran unos solemnes “memos”. La soberbia de la civilización actual es mala. Creemos que porque tenemos ordenadores, aviones, todo género de máquinas…, somos superiores en inteligencia y que cualquier generación anterior no sabría ni contar los dedos de sus manos. Muchas veces me pregunto que le pasaría a las personas de esta generación si su barco o avión accidentado los dejara abandonados en una isla desierta. De pronto pasarían de la generación de la tecnología a la edad de piedra y sin opciones de salir de ella. Nuestro mundo actual es la suma de los esfuerzos de una generación tras otra. Construimos sobre lo que dejaron nuestros antepasados y, nuestros descendientes, construirán sobre lo que nosotros les dejemos. Entender esto, la capacidad intelectual y de raciocinio es la misma hoy que hace 2000 años. Jesús de Nazaret murió y resucitó y, aunque no tuvieran un teléfono android para hacer fotos y videos del acontecimiento, sus testigos saben lo que vieron y dieron testimonio de ello. No lo hizo ninguna persona antes que Él y no lo ha hecho nadie después. Jesús dijo de sí mismo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida”. Me sorprende, más allá de lo que puedo explicar con palabras la locura de esta paradoja. Por miedo a la muerte por un virus la gente está dispuesta a hacer lo que sea necesario. Sin embargo, por miedo a la muerte que se presenta de múltiples formas, no son capaces de buscar y seguir a aquel que estaba muerto y resucitó de los muertos. Jesús de Nazaret nos abrió el camino para vivir más allá de lo que conocemos de este mundo. Ha habido miles de millones de seres humanos sobre la Tierra, grandes y pequeños, ricos y pobres, sabios y necios, emperadores, conquistadores…, pero solo uno tiene la clave de la vida, solo uno venció a la muerte, solo uno trae la salvación, Jesús de Nazaret. Buscarle mientras estáis vivos, buscarle mientras podéis hallarle. Si queréis vivir Jesús tiene la respuesta y nadie más que El pues estaba muerto y volvió a la vida. Esa es la prueba y no hay ninguna que pueda superarla.
Juan Miguel Martín (Escrito el 09-05-2021)
7
LA LOCURA DEL SER HUMANO.
Caminaba un viajero entre dos ciudades cuando en medio del trayecto se encontró con un extraño. Este venía de frente y le cerraba el paso.
Extraño: “Viene una catástrofe. Un gran terremoto se aproxima.”
Viajero: “¿Eso como lo sabes?”
Extraño: “Lo dice Dios, el Verdadero, el Único”
Viajero: “¿Le has visto? ¿Te lo ha dicho El en persona?”
Extraño: “No, me lo ha contado el pastor que lo sabe todo”
Viajero: “Ese pastor que lo sabe todo. ¿A visto a Dios? ¿A hablado con El?
Extraño: “No pero tiene un libro y en ese libro está escrita la verdad”.
Viajero: “Ese libro del que me hablas. ¿Lo ha escrito Dios?”
Extraño: “Si”
Viajero: “Entonces ese pastor a visto a Dios escribiendo el libro que luego le ha dado.”
Extraño: “No. Un ser celestial dicto al pastor el libro”
Viajero: “¿Eso quien lo dice? ¿Que pruebas hay de ello?”
Extraño: “El pastor que lo sabe todo lo ha dicho. Su palabra lo confirma”.
Viajero: “Ese pastor que lo sabe todo no puede ser juez y acusado al mismo tiempo. ¿Ha sido testigo ese pastor que lo sabe todo y tu de algún hecho extraordinario que los hombres no podamos hacer?
Extraño: “No pero en aquella ciudad todas las personas le creen”.
Viajero: “Sal de mi camino y usa el cerebro cuando lo encuentres. No me hagas perder más tiempo.”
Fin de la historia.
Voy a tocar dos aspectos que rigen los destinos del mundo:
– La política.
– La religión.
De la política.
La credulidad de la especie humana no deja de asombrarme. A pesar de ello no dejo de decir que todos tenemos cerebro solo hay que usarlo, eso es todo.
Pensar, por ejemplo, en el país que tenemos. Yo siempre he dicho que “cada país tiene lo que se merece”. Suiza o Noruega no son grandes porque les haya tocado la lotería sino porque sus ciudadanos ponen el nivel muy alto a sus gobernantes. Los partidos políticos deberían pagar un alto precio por lo que hacen. Tener presente que, si votáis a un partido político después de haber mostrado casos de corrupción, estáis dando por buena esa actitud y dando carta blanca para repetirla. Luego veis que suben el precio de la luz como si tuviéramos el sueldo de los holandeses, suben los impuestos, cierran ciudades, regiones y negocios como si la gente viviera del aire sin necesidad de trabajo, bajan la velocidad en ciudad a 30 km/h y lo próximo podría ser 70 km/h en las carreteras convencionales… Los impuestos solo sirven para alimentar taifas de políticos, consejeros, delegados…, en provincias, autonomías y el estado. Toda esta maquinaria es avalada por un pueblo que vota fijo a uno o a otro. Lo único que soluciona esto es educando a los políticos. Se hace así. El partido político que sirve en primer lugar a sus intereses, a la UE, a la ONU o se corrompe no debe ser votado NUNCA MÁS. El único partido que puede ser votado más de una vez es el que protege realmente los intereses de la población. Si les mostráis que solo gobernarán cuatro años y luego tendrán que disolver el partido y formar uno nuevo estaréis captando su atención.
De la religión.
En general he encontrado, que las personas que nacen en lugares dominados por una determinada religión, no cambian. Suele ocurrir que se vuelvan “no practicantes” cuando se sienten desencantados de su fe. No se hacen preguntas sobre si están en la verdad ni la buscan. Es muy raro que cambien sus creencias religiosas. Esto también es falta de juicio. Se me asemeja a nacer tonto y quedarse tonto toda su vida estando rodeado de libros para adquirir la sabiduría.
La memoria de esta generación es débil, no recuerda el pasado y eso va en su perjuicio. En lo que se refiere a la religión ha habido muchas a lo largo de la historia humana. Hubo muchos dioses en la antigüedad y también aquellas personas los defendieron, por encima de cualquier consideración. Ya fuese Jupiter, para los romanos, Ares, para los Griegos, Osiris, para los Egipcios, Marduk, para los Babilonios o Quetzalcóatl, para los mexicas…, aquellos pueblos nacieron, vivieron, lucharon y murieron por sus dioses.
Llegado ha este punto podría decir algo como: “Solo hay un Dios y es…” No lo voy a hacer, es demasiado fácil y ya lo han hecho otros hombres. No voy a decir que hay un solo Dios ni tampoco que son una legión en un Olimpo.
Voy a marcar la diferencia. Si hay un Dios o Dioses será capaz de hacer cosas que ningún ser humano que existe o haya existido sea capaz de hacer. Ese Dios o Dioses habrán mostrado a los seres humanos cosas que ningún otro “Dios” o “Dioses” sean capaces de hacer.
Yo lo he encontrado. No hay ningún Dios que haya existido o existe capaz de hacer lo que El ha hecho. Yo os hablo del Dios y Padre de Nuestro Señor Jesucristo.
¿Sabéis cuál es la diferencia? Jesús murió en una cruz y hay testigos de ello (Mateo 27) y resucitó de los muertos (Mateo 28). No hay ningún ser humano o “Dios” que haya existido o existe capaz de resucitar excepto el Dios y Padre de Nuestro Señor Jesucristo.
Cuando los discípulos de Juan preguntan Jesús les dice (Mateo 11:5): “Los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos salen de la tumba, y a los pobres es anunciado el evangelio“. Jesús levanta de la tumba a la hija de Jairo (Marcos 5) y a Lázaro (Juan 11:38-34). De todas estas cosas hubo testigos. Nada de esto lo hizo ningún otro “Dios” o “Dioses” que exista o hayan existido y todo ello es prueba de que Jesús de Nazaret es el único hombre en la historia de la humanidad, y ninguno más, que puede ser creído. Sus obras jamás nadie las hizo ni podrá repetirlas sin la asistencia de Jesús.
¿Recordáis la historia del principio? Dejarme que os responda. Lo que os cuento está escrito en el Nuevo Testamento que forma parte de la Biblia. Fue escrita por hombres inspirados por el Espíritu Santo. Este es Dios, es la Tercera Persona de la Santísima Trinidad. Jesús, la Segunda Persona de la Santísima Trinidad, lo da a quien cree en El y se bautiza, vive en nuestro alma y te habla y guía. No importa cuánto tiempo pasó hasta que empezaron los discípulos a escribir ya que Dios mismo, el Espíritu Santo, dictó las palabras a las personas que escribieron los libros del Nuevo Testamento. Ahora, si sois listos, pediréis pruebas del Espíritu Santo. También hubo testigos de lo que podía hacer el Espíritu Santo. Os mostraré solo algunas cosas, aquellas que no puede hacer ningún ser humano por si solo. Cuándo los discípulos recibieron el Espíritu Santo hablaban en lenguas de otras naciones que nunca habían aprendido antes (Hechos de los apóstoles 2). Pedro y Juan curan a un paralitico (Hechos 3:1-11). Pedro devuelve la vida a una mujer muerta Tabita (Hechos 9:36-43). Eso son solo ejemplos para que creáis, de todo ello hubo testigos y ningún otro “Dios” o “Dioses” y ningún ser humano lo hizo antes ni después. Los discípulos de Jesús recibieron a Dios, la Tercera Persona de la Santísima Trinidad, en su alma y es el Espíritu Santo quien obra estos prodigios. Ved pues que puedo mostrar que el Espíritu Santo es real pues obra cosas que ningún ser humano sería capaz, lo envía Jesús a aquellos que creen y se bautizan en su nombre. Fue este Espíritu Santo el que dicto los libros del Nuevo Testamento que forman la Biblia.
Finalmente en cuanto a Dios saber esto. El agua es líquida, es vapor y es hielo. El hielo es sólido, el vapor gaseoso, no obstante es agua el vapor, es agua el líquido y es agua el hielo. Son tres y los tres son uno. Dios es Padre, Hijo y Espíritu Santo, la Primera, Segunda y Tercera Persona de la Santísima Trinidad, tres Personas pero un solo Dios. Recordar al agua en hielo, líquido y vapor.
Juan Miguel Martín (Escrito el 16-05-2021)
8
LA ESCLAVA DE DIOS
Uno de los textos más malinterpretados de la Biblia es acerca de quien es la madre y los hermanos de Jesús. Nuestros hermanos protestantes ven en este texto una “bajada del pedestal” a la Virgen María, madre de nuestro Señor Jesucristo. Con este texto muchos cristianos piensan que la Virgen María es una cristiana más, pero le retiran el lugar que la Iglesia Católica Apostólica y Romana le ha dado a lo largo de los siglos.
Quiero con este pequeño artículo descubriros una sorpresa. En realidad, en las palabras de Jesús, está haciendo un elogio maravilloso a su madre. Lejos de quitarle merito, en verdad, le tributa un amor inmenso en esas palabras. Vamos a pasar a leer el evangelio y el texto en cuestión:
Lucas 11:27-28
«27. Sucedió que, estando él diciendo estas cosas, alzó la voz una mujer de entre la gente, y dijo: «¡Dichoso el seno que te llevó y los pechos que te criaron!» 28. Pero él dijo: «Dichosos más bien los que oyen la Palabra de Dios y la guardan.»»
Fijaros bien en el hilo de la conversación. Jesús está predicando y, en un momento dado, una mujer alza la voz para alabar a la madre de tan glorioso hijo (Jesús). Es entonces cuándo Jesús gira las palabras para dar la prioridad a aquellos que oyen la Palabra de Dios y la guardan.
¿Cuál es la clave que descifra la alabanza a la Virgen María de Jesús?
En apariencia daría la impresión que retirado el intento de la mujer por encumbrar a la Virgen María. Entonces los hermanos protestantes ven en ello una “desautorización” al intento de aquella mujer por encumbrar a su madre.
No es verdad esta interpretación, es solo que no se ha prestado atención a las palabras de Jesús y ahora vamos a descubrir algo impresionante. El amor de un Hijo (Jesús) a su madre.
Leer otra vez para comprender ese texto del evangelio. La mujer está alabando a la Virgen María, madre de nuestro Señor Jesucristo, con base en los prodigios, obras y palabras de Jesús. Mirar bien que la mujer pone la “grandeza” de la Virgen María por ser la madre de Jesús. Ahora quiero que llevéis vuestra mente a otros siglos cuando, de la misma manera, se alababa la grandeza de la madre del rey por ese mismo hecho, ser la madre del rey. Ahora estáis capacitados se os está abriendo la puerta. Nuestro Señor Jesús no desea que se vea el mérito de su madre, la Virgen María, en el hecho de ser su madre. En realidad la grandeza de la Virgen María es anterior al nacimiento de Jesús. Si, así es, la grandeza de la Virgen María viene de atrás, del tiempo cuándo aún Jesús no estaba en su vientre. Vamos a verlo.
Lucas 1:26-38
«26. Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, 27.a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. 28. Y entrando, le dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.» 29. Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. 30. El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; 31. Vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. 32. El será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; 33. Reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin.» 34. María respondió al ángel: «¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón?» 35. El ángel le respondió: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios. 36. Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez, y este es ya el sexto mes de aquella que llamaban estéril, 37. Porque ninguna cosa es imposible para Dios.» 38. Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» Y el ángel dejándola se fue.»
Hemos llegado al desenlace, el punto en el que vais a comprender las palabras de Jesús. Cuándo el arcángel San Gabriel se aparece a la Virgen María la respuesta de la Virgen María es: “He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra”.
¿Qué es un esclavo/a?
Es una persona privada de su libertad y voluntad, una persona que sirve a su amo de manera incondicional. La Virgen María presenta por respuesta a Dios una absoluta e incondicional obediencia, de su boca y su mente surge la palabra “esclava” para definir su rendición absoluta al servicio de nuestro Señor y Dios. No hay mayor entrega y servicio a Dios que esa entrega absoluta y sin condiciones. Solo queda añadir la difícil misión a la que se enfrentaba. En el momento de su respuesta la Virgen María acepta lo que Dios le pide aún a sabiendas de lo que podría ocurrir. Os recuerdo que aún en el siglo XX, una madre con un hijo de padre desconocido era mal vista por la sociedad. La Virgen María no sabía como reaccionaría José, ni las personas que la rodeaban. Podéis imaginar que en aquel tiempo, una mujer con un hijo, no casada y de padre desconocido podría ser demasiado duro para una mujer. La Virgen María confía en Dios incondicionalmente a pesar lo que sabe que puede sufrir. Más tarde veremos que José acoge a la Virgen María y al niño que lleva en su vientre, Jesús, el Hijo de Dios. El resto de la historia ya la conocemos.
Ya podéis entender las palabras de Jesús después de esto. Vamos a leerlas otra vez:
Lucas 11:27-28
«27. Sucedió que, estando él diciendo estas cosas, alzó la voz una mujer de entre la gente, y dijo: «¡Dichoso el seno que te llevó y los pechos que te criaron!» 28. Pero él dijo: «Dichosos más bien los que oyen la Palabra de Dios y la guardan.»»
Solo hubiera faltado a esas palabras de Jesús algo tan humano quizá como: “dedicado a mi madre que se entregó a la voluntad de Dios desde el principio”. Jesús está ensalzando a su madre, la Virgen María, la grandeza de su madre no viene de ser la madre del Hijo de Dios. La grandeza de la Virgen María viene de su obediencia absoluta e incondicional a la voluntad de Dios. Son aquellas palabras de la Virgen María: “He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra”. Es esa rendición incondicional por la que Dios la ensalza por encima de todas las mujeres y la hace Madre de la Segunda Persona de la Santísima Trinidad, de Jesucristo, Nuestro Señor.
Juan Miguel Martín (Escrito el 05-07-2021)
9
LA TELEFONÍA DE DIOS Y LA DEL DIABLO
Introducción.
Antes de entrar en el artículo es necesario hacer una matización. A lo largo del artículo hablo de los “hijos de Dios” y los “hijos del diablo”. Cristianos, “hijos de Dios”, no son todos los que van a la iglesia, ni son tampoco todos los que están en ella. Por tanto aplicaremos las palabras de Jesús para conocer quienes sirven a Dios.
Mateo 7:16-20 “Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos? .Así, todo árbol bueno da frutos buenos, pero el árbol malo da frutos malos. Un árbol bueno no puede producir frutos malos, ni un árbol malo producir frutos buenos. .Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y arrojado al fuego.Así que por sus frutos los reconoceréis.»
Mateo 7:21 “No todo el que me diga: «Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial.»
Llegados a este punto alguno dirá. “¿En que aventaja entonces ir a la iglesia?”
Pues es la diferencia entre beber agua de una botella a beberla directamente del manantial. Aunque esto daría para otro artículo la iglesia la fundó Jesús y los apóstoles sentaron las bases de la iglesia que hoy en día conocemos.
Atados a nuestros teléfonos.
Hoy en día todos estamos conectados por medio de los teléfonos móviles. De cierto que todos estamos en algún operador. Lo que es interesante son las llamadas cuando el teléfono que llama y el que recibe pertenecen a la misma compañía telefónica. Cada compañía suele tener unos planes en los que las llamadas de teléfono a números de la misma compañía son gratis, en cambio, si llamas a un teléfono de otra compañía debes pagar por ello.
Los seres humanos, aun cuando no lo sepamos, no seamos conscientes o no nos importe servimos a Dios o al diablo.
Mateo 12:30 “El que no está conmigo, está contra mí; y el que no recoge conmigo, desparrama.”
Lucas 9:50 “Pero Jesús le dijo: No se lo impidáis; porque el que no está contra vosotros, está con vosotros.”
Más allá de nuestros cuerpos mortales tenemos un alma espiritual y esta está “conectada” con Dios o con el diablo.
Cada día, desde que nos levantamos de la cama, estamos rodeados de personas, bien sean familiares, amigos, vecinos, compañeros de trabajo… Todas estas personas están “conectadas”, tienen su “línea telefónica” con Dios o con el diablo. En este punto retomo las líneas que escribí al principio. Recordar, las llamadas telefónicas, dentro del mismo operador son gratis pero si se llama de una compañía telefónica a otra estonces se paga. Me gustaría poder utilizar este símil para decir que así ocurre entre las personas que pertencen a Dios y las que pertenecen al diablo.
Jesús dijo que el que no está con Él esta contra Él. El opositor, el enemigo es el diablo (Satanás significa opositor). En la vida de las personas cada día nos relacionamos con personas que, indefectiblemente, sirven a Dios o al diablo. Las llamadas a un número de teléfono de otra compañía diferente a la nuestra tiene un coste. Asimismo nuestra relación, como hijos de Dios, con los hijos del diablo tiene un coste. Siguiendo con el símil, las llamadas telefónicas cuestan tanto como tiempo permanezcas al teléfono. Nuevamente el “coste” de nuestras relaciones con personas que sirven al diablo tiene un valor en relación a la profundidad de nuestra unión a los hijos del diablo. Cruzarse con una persona y decir un simple “hola” no tiene coste, el matrimonio de un hijo de Dios con uno del diablo tiene un precio más elevado de lo que podemos imaginar pues sólo Dios conoce el alma de las personas. Entre uno y otro se desenvuelven nuestras vidas de la mañana a la noche en medio de un mundo conectado con el más allá. Un mundo espiritual invisible, como las ondas que unen nuestros teléfonos móviles, y sin embargo, un mundo espiritual que influye decisivamente en las relaciones de unos con otros.
En nuestra vida diaria recibimos constantemente llamadas de otras compañías telefónicas ofreciéndonos un plan mejor y el cambio a dicha compañía. Son campañas muy agresivas, llegan a ser muy pesados, llamando con diferente números ofreciendo constantemente el cambio a un plan “mejor”.
Ahora es importante que notéis que esto mismo pasa mientras el hombre camina sobre la Tierra. Hasta el día de la muerte el diablo está tratando de arrastrar a los hijos de Dios a su bando. Así que igual que hay personas que cambian de compañía telefónica también hay hijos de Dios que se vuelven hijos del diablo e hijos del diablo que se arrepienten, aceptan a Jesús, piden perdón por sus pecados…, y se convierten en hijos de Dios.
El diablo nos convierte en hijos del diablo cuando “desconectamos” nuestra línea telefónica con Dios, cuando nos apartamos de su camino. Esto sucede a través de los medios de comunicación que nos guían por una conducta de vida ajena al deseo de Dios para nosotros. También nos debían las personas que no sirven a Dios pues sus intereses son opuestos a los de los hijos de Dios y nos llevan por un camino trazado por el diablo. Nosotros mismos, en nuestros quehaceres diarios, somos arrastrados fuera del camino de Dios. Podemos decir que estamos muy ocupados para dedicar un tiempo a la oración o para conocer las palabras de Jesús en las escrituras. Podemos afirmar que tenemos que ir al trabajo, hacer la comida, ir al gimnasio, la compra…, al final del día no queda tiempo para Dios en toda la semana.
Lucas 10:40-42 “Pero Marta se preocupaba con todos los preparativos; y acercándose a El, le dijo: Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. Respondiendo el Señor, le dijo: Marta, Marta, tú estás preocupada y molesta por tantas cosas; pero una sola cosa es necesaria, y María ha escogido la parte buena, la cual no le será quitada.”
Hay una forma más en la que el diablo nos aparta de Dios, las tentaciones. La tentación llega a la mente en la forma de un pensamiento. Escuchar bien lo que voy a decir, un pensamiento, en su forma, es igual a otro. Pensar en un vaso de agua al lado de otro, es agua y no hay diferencia excepto cuando pruebas un agua y la otra y notas la diferencia. De este modo nuestros pensamientos y aquellos implantados por el diablo (las tentaciones) son iguales a dos vasos de agua.
¿Cómo identificamos cuales son nuestros y cuales nos implanta el diablo para desviarnos de Dios y hacer lo que es malo?
Los malos pensamientos pueden proceder de nosotros mismos o ser una tentación del diablo para hacer lo malo pero la clave para vencerlos y permanecer en el camino señalado por Dios es el siguiente.
1 Pedro 1:16 “porque escrito está: SED SANTOS, PORQUE YO SOY SANTO.”
Pedirle a cualquiera de los que está leyendo este artículo que sea santo debe parecerle semejante a pedirle que sea científico, ingeniero y astronauta de la Nasa durante el próximo año. No os alarméis no es así. Ser hijo de Dios es un camino a lo largo de nuestra vida, puedes caer un millón de veces y pedir perdón a Dios por ello, pero debes levantarte cada vez y volver al camino trazado por Dios. Esa es la clave para mantenerte “conectado” a la línea telefónica de Dios, es el camino para ser santo. Esto es lo que te mantiene alejado del diablo y de sus proposiciones.
Escuchar bien, a lo largo de los evangelios Jesús habló muchas veces del trigo (hijos de Dios) y la cizaña (hijos del diablo), el trigo y la cizaña crecen juntos hasta que llega la siega. Recordar entonces que debéis hacer una elección para vuestras vidas. En vuestra vida, cada día estáis rodeados de hijos de Dios y de hijos del diablo y estos pueden ser familiares, amigos, vecinos, compañeros de trabajo, gente con la que os relacionáis en los espacios públicos… El mundo que conocemos es, en general, contrario a la voluntad de Dios y, por tanto, un camino para la perdición, un camino que nos lleva a ser hijos del diablo. Es vuestra responsabilidad escoger las personas que queréis a vuestro lado y a quien servir a Dios o al diablo.
Juan Miguel Martín (Escrito el 05-09-2021)
10
LA IGLESIA CATÓLICA SE HUNDE.
Un artículo periodístico revela un año más la debacle de la Iglesia Católica en España.
Como católico… ¿Que puedo decir acerca de ello?
Aparentemente este un fenómeno que amenaza con hacer desaparecer la Iglesia Católica. Una especie de Tsunami imparable. Ante este problema se dice que la Iglesia está anticuada, que debe acercarse a los jóvenes, que debe modernizarse… Todo esto parte de un desconocimiento de aquello que trasciende, de la verdad revelada por Jesús.
Jesús dijo de sí mismo: “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida; nadie viene al Padre sino es por mi”. (Juan 14:6). Si podemos pensar un momento en estas palabras nos van a revelar algo que debe marcar nuestras vidas. A día de hoy 27-11-2021 hay en el mundo 7900 millones de personas pero ninguna de ellas tiene la verdad. De nada va a servir afirmaciones como “el 90% de los españoles” o “todo el mundo hoy en día piensa…” ya que la verdad y el camino son Jesús de Nazaret. De este modo aunque toda la población mundial decida que es moderno o justo hoy en día si es contrario a las enseñanzas y mandamientos de Jesús de Nazaret no conduce a nada sino a la muerte y al infierno. En vano esta generación dice que la Iglesia está anticuada o que no conecta con las necesidades o creencias de esta generación. Si algo revela la debacle en el número de católicos en España es que la cantidad de personas que van por caminos de muerte es mayoritaria. Recordar de nuevo que fue Jesús quien dijo: “Yo soy la Vida”. Debería estremecernos el pensar las consecuencias para todos aquellos, la mayoría, que siguen caminos de muerte hasta que abandonan este mundo.
Voy a añadir algo más para que esa falsa seguridad en la mayoría os haga volver a pensar en quien debéis confiar y de que debéis desconfiar.
II Pedro 2:5-7
«Pues si Dios no perdonó a los Ángeles que pecaron, sino que, precipitándolos en los abismos tenebrosos del Tártaro, los entregó para ser custodiados hasta el Juicio; si no perdonó al antiguo mundo, aunque preservó a Noé, heraldo de la justicia, y a otros siete, cuando hizo venir el diluvio sobre un mundo de impíos;»
«si condenó a la destrucción las ciudades de Sodoma y Gomorra, reduciéndolas a cenizas, poniéndolas como ejemplo para los que en el futuro vivirían impíamente; 7.y si libró a Lot, el justo, oprimido por la conducta licenciosa de aquellos hombres disolutos»
Fijaros bien que el mundo antiguo estaba poblado. Noé tan sólo era un hombre con una familia, un insignificante grano de arena en una playa. Toda la humanidad del mundo antiguo tenía sus leyes, eran una mayoría superior al 99,99% de la población. Noé, y su familia, en medio de aquel mundo, no representaba ni el 0,00000001%. Sin embargo Dios solo encontró justo y salvó a Noe y siete personas de su familia.
Las ciudades de Sodoma y Gomorra, con sus reyes y población, también eran grandes y bien pobladas. Mas del 99% de la población de estas ciudades tenían su modo de vida, sus valores, leyes, costumbres… Eran la inmensa mayoría. ¿Quien era Lot y su familia? Nadie. Tan solo una gota de agua en un océano. Sin embargo solo Lot y su familia fueron salvados por Dios de la destrucción de estas ciudades.
Lucas 4:24-27
Pues bien, les aseguro que a ningún profeta lo aceptan en su propia tierra. No cabe duda de que en tiempos de Elías, cuando el cielo se cerró por tres años y medio, de manera que hubo una gran hambre en toda la tierra, muchas viudas vivían en Israel. Sin embargo, Elías no fue enviado a ninguna de ellas, sino a una viuda de Sarepta, en los alrededores de Sidón. 27 Así mismo, había en Israel muchos enfermos de lepra en tiempos del profeta Eliseo, pero ninguno de ellos fue sanado, sino Naamán el sirio.»
Eran los tiempos del rey Ajab de Israel (I Reyes, capítulos 16, 17 y 18). Israel hizo lo malo, eran mayoría. ¿Significaba eso algo? Pues ver que Dios envió hambre y sequía por tres años y medio a Israel. Sin embargo Elías, el profeta, fue enviado al norte, a Fenicia, a una viuda fenicia en Sarepta, a esta mujer Dios le multiplico la harina y el aceite durante aquel tiempo y no le faltó de comer. También podríamos hablar del profeta Eliseo y del leproso Naamán el siro y muchos más pero no es necesario.
La Iglesia Católica no está en crisis ni tiene que cambiar o amoldarse a las costumbres del mundo de hoy en día. Lo cierto es que el mundo, una vez más, sigue caminos contrarios a la voluntad de Dios, siguen caminos de muerte. No importa que los católicos seamos el 20% o el 1%. Al igual que los hechos relatados como ejemplo, lo único importante es quien sigue a Jesús. Es una temeridad la falsa confianza en aquello que el mundo piensa, sus costumbres o lo que hace. No os aferréis a la mayoría pues son ovejas guiadas por lobos que ni saben de dónde vienen ni a dónde van. (Mateo 10:16)
Juan Miguel Martín (Escrito el 27-11-2021)
11
AL SERVICIO DE SU MAJESTAD EL DIOS DE ISRAEL
No existe mejor decisión en la vida de una persona que la del servicio a las ordenes de su Majestad el Dios de Israel. Nuestro Rey es el Creador de todo cuanto existe. Su Majestad el Dios de Israel Era, Es y Será por los siglos de los siglos. Nuestro Reino no es ninguna democracia y no importa lo que diga en nuestro documento de identidad ni quien crea que tiene poder sobre nosotros en la Tierra. En realidad nuestra lealtad y servicio es solo para Su Majestad el Dios de Israel y Padre de Nuestro Señor Jesucristo. Aquellos de nosotros que entramos al Servicio de su Majestad el Rey de Israel vamos por la vida con la cabeza alta y con seguridad porque pase lo que pase, nuestras vidas, presente, pasado y futuro reside en las amorosas y generosas manos del Dios de Israel.
Voy a empezar con una historia.
Todos habéis oído hablar de como Jesús lavó los pies de sus discípulos pero no entendéis realmente el suceso. Este es un buen punto de partida para conocer a aquel que el es el verdadero dueño y Señor de todo cuanto existe en el planeta Tierra y en el Universo.
En época de Jesús, en Israel y en aquellos países poblados por árabes era costumbre recorrer los caminos con sandalias. En los hogares solía haber grandes alfombras de espeso pelo y costosos diseños y fabricación. Esas alfombras eran un tesoro en toda vivienda. Cuándo llegaba alguien a una casa se descalzaba a la entrada y se lavaba los pies para no manchar la alfombra. En las casas ricas un sirviente o una sirvienta se encargaba de lavar los pies a los recién llegados. Quiero hacer una aclaración acerca de lo que vais a leer a continuación. Jesús y los apóstoles estaban ya cenando y este suceso ocurre cuando ya estaban a la mesa y en medio de la cena, sin embargo, el hecho, viene del ritual que he contado.
Vamos a pasar al texto bíblico:
“Del santo Evangelio según san Juan 13, 1-15Antes de la fiesta de Pascua, sabiendo Jesús que había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, él, que había amado a los suyos que quedaban en el mundo, los amó hasta el fin. Durante la Cena, cuando el demonio ya había inspirado a Judas Iscariote, hijo de Simón, el propósito de entregarlo, sabiendo Jesús que el Padre había puesto todo en sus manos y que él había venido de Dios y volvía a Dios, se levantó de la mesa, se sacó el manto y tomando una toalla se la ató a la cintura. Luego echó agua en un recipiente y empezó a lavar los pies a los discípulos y a secárselos con la toalla que tenía en la cintura. Cuando se acercó a Simón Pedro, este le dijo: «¿Tú, Señor, me vas a lavar los pies a mí?». Jesús le respondió: «No puedes comprender ahora lo que estoy haciendo, pero después lo comprenderás». «No, le dijo Pedro, ¡tú jamás me lavarás los pies a mí!». Jesús le respondió: «Si yo no te lavo, no podrás compartir mi suerte». «Entonces, Señor, le dijo Simón Pedro, ¡no solo los pies, sino también las manos y la cabeza!». Jesús le dijo: «El que se ha bañado no necesita lavarse más que los pies, porque está completamente limpio. Ustedes también están limpios, aunque no todos». El sabía quién lo iba a entregar, y por eso había dicho: «No todos ustedes están limpios». Después de haberles lavado los pies, se puso el manto, volvió a la mesa y les dijo: «¿comprenden lo que acabo de hacer con ustedes? Ustedes me llaman Maestro y Señor, y tienen razón, porque lo soy. Si yo, que soy el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros. Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes.”
El Reino de Dios es un Reino de Servicio. Esto significa que aquellos llamados grandes en el Reino de los Cielos (en la Tierra jefes, ministros, presidentes, reyes, ricos, poderosos…) son en el Reino de los Cielos los que más sirven a los demás. Entender una cosa, la Tierra y sus gobiernos, sistema y leyes nada tienen que ver con el Reino de los Cielos. En verdad pareciera que el Reino de su Majestad Dios de Israel fuera de la galaxia más lejana del firmamento. Voy a marcar este concepto con un ejemplo ya que es clave.
El 16 de septiembre de 2003, en una subasta de la casa Doyle de Nueva York, la porcelana azul y blanca china se llevó todos los aplausos. Ese día, un inusual jarrón aplanado con diseño de nubes y dragón de la dinastía Yuan (1271-1368), alcanzó el increíble precio de 5.831.500 dólares. Eso es lo que llamamos en la Tierra un objeto valioso. Este jarrón chino es antiguo, raro y digno de pagarse sus buenos cinco millones de dólares. Ahora voy a asombraros y desconcertaros porque en el Reino de los Cielos, una escoba comprada en una tienda, por tres euros, tiene más valor. Si, así es, ese jarrón chino en el Reino de los Cielos no vale nada y la escoba vale los cinco millones de dólares. La razón es que la escoba cumple un servicio, barre, mantiene limpios los suelos, su trabajo es un valioso servicio a toda la comunidad. El jarrón, en cambio, es un objeto inútil, un objeto colocado en un lugar y que no cumple ningún servicio valioso para la comunidad.
Lucas 22:24-27
«Entre ellos hubo también un altercado sobre quién de ellos parecía ser el mayor. El les dijo: «Los reyes de las naciones las dominan como señores absolutos, y los que ejercen el poder sobre ellas se hacen llamar Bienhechores; pero no así vosotros, sino que el mayor entre vosotros sea como el más joven y el que gobierna como el que sirve. Porque, ¿quién es mayor, el que está a la mesa o el que sirve? ¿No es el que está a la mesa? Pues yo estoy en medio de vosotros como el que sirve.»
Servir a su Majestad Dios de Israel y Dios del Universo es un camino de servicio al prójimo y, de este modo, aquel que más sirve, Dios le da más para que pueda servir aún mejor. Así se asciende en la nobleza del Reino de los Cielos.
Mateo 25:14-30
«Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes.A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos.Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos.Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos.Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor.Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló cuentas con ellos.Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos.Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.Llegando también el que había recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros dos talentos sobre ellos.Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste;por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo.Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses.Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos.Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.«
Jesús, Dios, Segunda Persona de la Santísima Trinidad, marcó el camino pues, siendo Dios, se hizo hombre y murió por todos nosotros para darnos vida. Dios se humilló hasta encarnar en la debilidad humana de la carne y sangre para hacerse el último de los hombres y ser colgado en la cruz para pagar el precio de nuestras injusticias. No hay un servició mayor que este. Detrás conocemos las vidas de muchos santos, hombres y mujeres, que desarrollaron sus vidas en un servicio gratuito a las personas que les rodeaban.
Ahora vamos a otro factor desconcertante del Reino de los Cielos. Los habitantes de este planeta, la Tierra, sabemos una cosa acerca del valor de las cosas. Para los terrícolas aquello que cuesta millones de euros es valioso, son aquellas cosas que solo los ricos y poderosos pueden poseer. Los habitantes de este planeta, la Tierra, no damos valor a aquello que es gratis pues no tiene valor. Aquello que es gratis no requiere esfuerzo por conseguirlo, está al alcance de cualquier persona y nunca valdrá nada. En el Reino de los Cielos, el servicio de los ciudadanos del Cielo, es un servicio gratuito que se hace por amor. Es comprensible no entenderlo pues el Reino de los Cielos pareciera lo más lejano del Universo al planeta Tierra.
Desde estas líneas os animo a leer los evangelios de Mateos, Marcos, Lucas o Juan y comenzar a aprender aquellas cosas de un mundo, el Reino de los Cielos, que es real y nada tiene con el planeta Tierra. Nuestro Dios es el Creador del planeta que habitamos y de todo lo que contiene. Este planeta no va a continuar dando la espalda a nuestro Dios indefinidamente. El juicio a los habitantes, reyes, presidentes, ministros, ricos y poderosos llegará más pronto o más tarde.
Los que estamos al Servicio de su Majestad Dios de Israel, peregrinos en el planeta Tierra, pero Ciudadanos del Reino de los Cielos os animamos a uniros a nuestro Reino. Jesús tiene un lugar para cada uno de vosotros/as allá dónde os encontréis. Jesús quiere que tú, que lees estas líneas, creas en él, que le sirvas y tengas vida eterna.
Juan Miguel Martín (Escrito el 21-03-2022)